Herramientas de inteligencia artificial en procesos de investigación científica 1e3a4f

Sonobiópolis, Naturaleza, Investigación y Sociedad.

Es la semana número 24 de este 2025, deseamos que se encuentre muy bien y estamos listos para esta emisión.

Bienvenidas, bienvenidos y iniciamos.

¿Quién es y qué hace? Hola, soy Roberto Carlos Morales, Coordinador de Datos y Productividad Institucional en el Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste.

Hoy quiero contarte cómo la Inteligencia Artificial, la IA, se está convirtiendo en la mejor colega del personal científico.

En diferentes etapas de un proceso de investigación, la IA puede aportar beneficios si se usa con responsabilidad.

Pensemos primero en la fase de la formulación de hipótesis y el descubrimiento de conocimiento.

La capacidad de la IA para analizar cantidades masivas de datos, lo que conocemos como Big Data, es asombrosa.

Imagina un buscador que no solo encuentra artículos científicos, sino que lee millones de ellos por ti y te dice, ¡Hey! Aquí hay un tema que pocos han estudiado. Eso hace hoy la IA con plataformas como Semantic Scholar.

Ahora, consideremos la etapa Diseño Experimental y la Recolección de Datos.

Por ejemplo, en 2025 estamos viendo cómo sistemas de la IA, después de procesar datos genómicos y moleculares de todo el planeta, están identificando con una velocidad sorprendente nuevos candidatos a antibióticos para combatir esas superbacterias que tanto nos preocupan.

Este problema complejo, que llevó una década a los microbiólogos resolver, se ha resuelto en solo dos días gracias a una nueva herramienta de inteligencia artificial.

En algunos laboratorios, brazos robóticos prueban miles de combinaciones químicas mientras un algoritmo decide el siguiente experimento.

Son los llamados laboratorios autónomos.

Y fuera de laboratorio, cámaras, drones y satélites vigilan el Amazonas.

Con inteligencia artificial, organizaciones ambientales detectan talas ilegales casi en tiempo real y los científicos reciben datos frescos de cámaras y micrófonos para planear su trabajo de campo para la conservación.

Por otra parte, en Chile, el proyecto ALERCE analiza cada noche los destellos del cielo y avisa en segundos cuando aparece una supernova, para que los astrónomos apunten sus telescopios sin perderse el espectáculo.

En la fase crucial del análisis y la interpretación, por ejemplo, para hacer pronósticos de clima, los ordenadores solían tardar horas.

El nuevo modelo ERT2 de NVIDIA los genera en minutos y con el doble de detalle.

Aquí en el Cibnor, un proyecto que usa la inteligencia artificial para predecir el comportamiento del proceso de compostaje y la calidad de la composta de residuos de frutas y vegetales lo hace a través de cientos de imágenes.

En Medicina, un estudio mostró que una inteligencia artificial puede señalar qué pacientes con cáncer de próstata realmente se benefician de un fármaco.

Al determinar qué pacientes tienen qué tipo de cáncer, la IA puede ayudar a identificar el tratamiento correcto.

Finalmente, llegamos a la etapa que hace que la ciencia avance, la comunicación y difusión de los resultados.

Aquí, la inteligencia artificial actúa como un increíble traductor y divulgador universal.

No solo asiste a los científicos a redactar textos más claros, sino que genera resúmenes para distintos públicos, traduce artículos a múltiples idiomas con una precisión contextual asombrosa y hasta alimenta plataformas interactivas donde puedes dialogar con un estudio para resolver tus dudas.

El impacto de esto es inmenso.

Significa que un estudiante en cualquier parte de Latinoamérica, por ejemplo, pueda acceder y comprender un descubrimiento de vanguardia que antes estaba encerrado detrás de un muro de tecnicismos o de otro idioma.

La IA está, literalmente, democratizando el al conocimiento.

Pero este poder trae un reto enorme, la transparencia y la honestidad intelectual.

Por eso, cada vez es más común que las revistas científicas exijan una declaración de uso de inteligencia artificial.

La visión a futuro parece clara y emocionante.

Estamos caminando hacia una ciencia donde la alianza potenciadora entre la inteligencia humana y la inteligencia artificial nos permitirá, con suerte, resolver algunos de los grandes enigmas de nuestro tiempo y enfrentar los desafíos más apremiantes de la humanidad.

Patente número 330201 Método de Extracción de Harina de Langostilla Roja de Base Seca Esta es una alternativa de alimento balanceado para satisfacer la demanda del sector acuícola y aumentar la producción.

Si usted quiere saber más acerca de esta patente, le invitamos a escribir en su navegador Portafolio Tecnológico Cibnor y ahí encontrará esta y otras patentes.

El Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste, con la participación de los centros públicos pertenecientes a la Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación e Instituciones Afines presentó Sonobiópolis, un espacio para la comunicación pública de la ciencia.