¿Qué coches compran los españoles y qué ofrecen las marcas? Análisis con expertos del motor 6l474v

¡Ven conmigo para encontrar mi bolsillo! Y claro, dices tú, ¿para qué lo diseñas y para qué lo vendes y por qué lo quieres fabricar? Y ahora, claro, nosotros queremos reflexionar, Fernando, sobre todo, si es verdad que no ofrecen las marcas el coche que nosotros queremos.

Efectivamente, yo quería aprovechar, vamos a decir, la verdad no era un debate que teníamos en el guión hace un par de días o tres, pero luego ya cuando confirmamos la mesa que íbamos a tener queríamos saber la opinión de Nacho, de Álvaro y de Fernando.

Porque, además, me han soplado que tiene por ahí Nacho un estudio en el que está trabajando y que nos presentará el mes que viene aquí en AutoFM.

Pero, sobre todo, es algo que debe ir conectado, lo que quiere la gente con lo que le ofrecen las marcas.

No sé si es algo que está sucediendo.

O que debería ser la respuesta a las marcas, es decir, ¿qué es lo que quiere la gente comprar? Pues yo se lo voy a dar, no al revés.

Luego matizamos lo que quiere o lo que puede, pero vamos con Nacho.

Sí, hay que ir varios matices. Al final, como compradores, nos debemos al escaparate que nos den. Eso es lo que tenemos que entender.

Si las marcas nos ofrecen un escaparate concreto, pues eso es lo que tenemos.

Y, por eso, ahora mismo está pasando lo que está pasando, que ese escaparate ha dejado de ofrecer una de sus vitrinas, cierta tipología de coche, que es la que más que se demandaba y, sobre todo, en épocas tan complicadas, económicamente hablando, pueden ser una válvula, pueden ser la salida.

El patrón de búsqueda siempre es lo mismo. Tendemos, y sobre todo en España, es muy curioso.

Primero miramos lo que nos gusta, luego analizamos lo que podemos pagar y, al final, nos compramos lo que nos dejan.

Hombre, los sueños siempre están ahí. Yo me gustaría… ¿Habría sido un paseo y no trabajamos con la pareja? Yo, por supuesto, sí. Yo no hago pis sin permiso.

Normalmente no lo tenemos claro. Álvaro y José, que llevan menos años casados, no han dicho nada.

Es el patrón natural, ¿no? Primero hay que ofrecer, pues eso, la compra que está.

Ese factor, insisto mucho, lo hemos repetido muchas veces, no nos olvidemos.

Todavía somos pocas las personas que vemos el coche como una herramienta per se, ¿no? La mayoría del mercado lo ve como un producto totalmente aspiracional.

Correcto.

Entonces, lo primero que vamos a intentar colmar es esa pirámide, esa parte aspiracional.

Cuando ves que no la puedes, pues vas adaptándote hasta donde llegas.

Son patrones de búsqueda, en muchas ocasiones, muy divertidos.

Pero en nuestro caso, aunque en nuestra coyuntura actual, en la coyuntura española, en la coyuntura europea, lo que ha sucedido es que los vehículos asequibles, por lo que entendíamos como asequibles, han dejado de forma aparte el catálogo de las marcas.

Por supuesto, forzados por las imposiciones por la Agenda 2030, pero también es cierto que las marcas, en ocasiones, desde nuestro punto de vista, no han hecho los deberes adecuadamente.

¿Y por qué no han hecho los deberes adecuadamente? Porque hemos pasado una época pospandémica donde se ha roto el equilibrio entre oferta y demanda y se han aprovechado de ello, y lo digo abiertamente.

Y se han aprovechado de ellos con precios que están fuera de la órbita del mercado normal y natural.

¿Qué sucede? Esos resultados, luego en las cuentas financieras, en las cuentas resultados con rentabilidades que jamás había visto la industria.

Esto lo vamos a ver la última vez, Fernando, de doble dígito en algún caso.

Son muy golosos para ciertos equipos directivos, ciertos componentes de equipos de dirección, donde sus bonos bilmillonarios van en el juego.

Sí, yo lo único que les disculpo es que les han obligado, con la Agenda 2030, a hacer unas inversiones también multimillonarias que han roto los ciclos de producto, que es lo que he dicho la otra vez.

Y que eso también les ha obligado a tener un remanente mayor, porque si no, no hay quien renueve las pólizas de crédito.

Entonces, al final, todo eso es una parte de estrategia, pero efectivamente también hay una parte de codicia.

Sí, de codicia o de avalicia directiva, podemos decirlo.

Entonces, ahora por fortuna ya se han visto las orejas al lobo y poco a poco estamos volviendo a tener ofertas más coherentes con el mercado actual cada semana o cada mes.

No es raro el anuncio, desde lo que llamamos de año, de alguna marca que está rebajando sensiblemente toda su gama.

No de precio final, sino de precio de venta al público, es decir, de precio de partida.

Eso es muy significativo.

Es cierto que luego la situación económica, los tipos de interés, no han favorecido a hacer como debía, pero ahora es cierto que esta rebaja de tipos de interés se ha tardado demasiado en repercutirla al público.

Y ahora, por primera vez, estamos empezando a volver a ver ofertas financieras muy buenas.

Y entendiendo esta parte, que siempre os insisto y insisto a los oyentes, al final, lo que condiciona que nos compremos un vehículo u otro no es cuánto cueste el vehículo, sino la capacidad o la facilidad de acceder a ese bien que yo tenga.

Y eso se traduce en una cuota mensual, porque 8 de cada 10.