VuFyuM s07e38: La historia de los inventos y las ideas, con Daniel Torregrosa 3kr58

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Y cero, ¿no? Claro, onda cero.

En más de uno, un humano, un físico y un matemático.

Que... Ah, Alberto Parisi, muy buenos días.

Hola, muy buenos días, ¿qué tal? ¿Prefieres que hablemos hoy de pedos o hablamos de... Constantinopla? De la caída de Constantinopla, pero vamos a ver, que es el tema del día, obviamente.

Vamos con Constantinopla, todo el día con Constantinopla.

Hola, Santi García Cremades, buenos días.

¿Os ha colado mi opinión? Sí, sí, como que no te interesa mucho Constantinopla ni a mí me interesa.

Pero la ciudad más brillante de la antigüedad y el medievo, pero es que, en fin, esto...

Bueno, en fin, es nuestro semestre.

Cada uno tiene su pedrada, ya está.

Pero escúchame, ¿dónde estáis vosotros dos? ¿En qué emisora? Es que no lo pone aquí.

O sea, qué cosas raras, ¿no? Pues estamos... Espera, escucha, a ver.

Sí, sí, escucho, por eso escucho cosas...

Ahí está.

Estamos en el Retiro, estamos en la feria El Libro.

¿En el parque del Retiro? Sí, sí, sí.

Estamos montando nuestra caseta, nuestra caseta de la feria El Libro.

Venga, ¿pero qué número es? ¿Para que puedan acercarse allí los oyentes? Por favor, no nos encorsete, Jorge.

Es una caseta imaginaria.

El número I, si quieres, el número I, el imaginario.

Perdón, el número I, dice.

¿Hola? ¿Cómo dirían otros? ¿Hola? Una caseta para hablar. Bueno, y es un número, ¿no? Lo que pasa es que es un número imaginario y nuestra caseta también.

Es que necesitamos una caseta imaginaria porque es que todo lo que queremos contar es muy grande.

Y si no es muy difícil de abarcar.

Esta es nuestra caseta científica, digamos.

Exacto.

O sea, para abarcar todo lo que cuenta El Libro, que estamos apadrinando...

Oh, apadrináis un libro, qué bonito. Me encanta.

En una caseta de verdad no nos cabría ni, vamos, tendría la densidad de una estrella de neutrones.

Pero no sé si estoy entendiendo bien del todo.

No, yo tampoco. No sé ni a qué libro se refiere, ni a qué caseta imaginaria, ni a qué es el número I.

Un poco de calma. Vamos a empezar.

Muy confuso.

Hemos puesto ruedas a nuestra caseta itinerante.

Y esto de ponerle ruedas no es casual tampoco.

Así nos ubicamos en la parte del retiro que nos vaya gustando más y vamos de forma...

Y donde dé sombra.

Optimizada, donde dé sombra también, pero donde haya más gente.

Ahí vamos contando nuestra historia, nuestra ciencia.

No hay ninguna tontería a lo de la caseta con ruedas, ¿eh? No, ninguna, ninguna. Y es que precisamente la rueda es uno de los inventos, bueno, no sé, científicos, pero tecnológicos, ¿no? De la historia, ¿no? No sé si sabéis dónde se inventó la rueda.

Pues por ahí, en lugares remotos.

Los de Cígris y el Éufrate.

Exacto.

¿Sí? ¿He acertado? No se conoce el lugar preciso, pero fue más o menos en Mesopotamia, en lo que ahora es Irak y el este de Siria.

Y allí, mientras se estaba desarrollando la escritura, aparecieron las primeras ruedas en el cuarto milenio antes de Cristo.

Antes de Cristo.

AC, que no es antes del COVID. Antes de Cristo, ¿eh? Antes de Cristo.

El AC original.

La rueda tiene ya 6.000 años, sí, claro.

6.000 años, sí, sí.

Y las primeras ruedas, sorprendentemente, no estaban destinadas al transporte.

No era para hacer carros ni nada de esto.

Eran ruedas de alfarero.

Un torno. Un torno fue la primera rueda.

Efectivamente.

Es que esto es como cuando hablamos de evolución, que siempre decimos, no, este órgano sirve para tal cosa, pero en realidad se había inventado para otra.

Pues la rueda es igual.

Luego, después de un tiempo de utilizar la rueda para hacer alfarería, la gente se dio cuenta de que le podían conectar un palo por el centro y a lo mejor al principio también era para usarlo para alfarería.

Igual era para que girase mejor el torno o algo así.

Pero claro, cuando lo pones en horizontal, la rueda con el palo, pues tienes el eje de una carreta.

Claro, como vuestra caseta, caseta con ruedas.

Eso es, eso es.

Alguien se le cayó el torno e inventó la rueda para moverse.

Ahí se inventó el movimiento.

Porque cada innovación tiene un efecto.

Y tira de la siguiente, ¿no? Estamos a hombros de gigantes, que decía aquel.

Pues aquí estamos, digamos, provocando un efecto dominó.

Y así, entre barro y comercio, nace también la escritura cuneiforme.

¡Qué bonita palabra! Esa es una palabra muy hermosa.

¿De dónde viene? Que viene del latín y viene de la palabra forma de cuña.

Cuneiforme es forma de cuña.

Porque cada trazo de la escritura cuneiforme, que lo busquen los oyentes en internet, suele ser ancho por un ladito y estrecho por el otro.

Es como una cuña, ¿no? Y eso era porque para escribir sobre la arcilla húmeda usaban unos punzones triangulares que dejaban marcas de ese tipo.

Santi, ¿voy haciendo ya sitio aquí a los egipcios, los griegos y los romanos? Es que ya hemos puesto muchas tablillas.

¿No iréis a abarcar la historia entera, no? Bueno, los romanos igual nos saltamos.

Aquí nos cabe de todo.

Los romanos no sé.

Los romanos a lo mejor no entran muy bien.

Pero los egipcios...

¿Cómo que no? Pero bueno.

Los egipcios sí, aparece.

Los egipcios eran unos genios, ya sabían, de números racionales, estos que se dividen.

Y usaban catálogos.